Consejos para viajar a Islandia

islandia1

El campo geológico de Namafjall Hverir, cerca del lago Myvatn, en el norte. /GETTY

Islandia es un país impresionante con unos paisajes sorprendentes que quitan el aliento. Además, ahora es más económico viajar allí, porque hay vuelos baratos desde varias ciudades españolas: Barcelona, Alicante, Gran Canaria, Málaga y Palma. Sin embargo, conviene tener en cuenta algunas cosas antes de emprender el viaje:

  • Es un país muy caro (hamburguesa y bebida, 20 euros), así que si vas corto de pasta conviene facturar algo de comida desde casa.
  • Llévate mucha ropa de abrigo. Aunque en verano las temperaturas son más suaves, hay lugares donde pasarás frío, sobre todo si vas de camping. Un abrigo grueso y una camiseta térmica serán de gran ayuda.
  • Alquila un 4×4. Es la única forma de llegar a lugares tan mágicos como el volcán Askjia o Landmannalaugar. Las excursiones a estos lugares son bastante caras. Una buena opción es la empresa islandesa Geysir.

bonus

  • Busca el cerdito: los supermercados Bonus, cuya imagen es una especie de cerdito loco, son los más baratos del país. Suelen estar a las afueras de los pueblos más grandes y son una buena opción para comprar fruta (casi siempre española) y todo tipo de comida.
  • No te olvides del bañador y la toalla: hay piscinas públicas con agua caliente por todas partes, son baratas (desde 6 euros) y funcionan como centro social. Así que es una experiencia que no te puedes perder.
  • Si buscas una alternativa a la muy turística Laguna Azul (que cuesta 50 euros y está siempre llena) te recomiendo los baños naturales de Myvatn, en el norte: las entradas cuestan entre 26 y 30 euros y no están tan llenos.
  • Echa en tu equipaje el saco de dormir: pasar la noche en una cama con tu saco suele abaratar el precio del alojamiento.
  • La gasolinera es tu amiga. Cuando vayas por sitios donde no te encuentres con nadie, ten en cuenta que en las gasolineras hay absolutamente de todo. Menos pan.
  • Si quieres recorrer la isla de forma circular necesitas al menos 10 o 12 días.
  • ¡Cuidado con las ovejas! En el este, están por todas partes y pastan a sus anchas por la carretera principal.
  • Y prepárate para sorprendente: verás decenas de cascadas, glaciares, volcanes y campos geológicos que te harán pensar que estás en otro planeta.

Nosotros fuimos cinco amigos y alquilamos un coche para dar la vuelta a la isla. He resumido el viaje en este reportaje en El Viajero y en este vídeo en El País. Aquí tienes una selección de fotos de lo que te vas a encontrar. Este blog reúne más ideas para viajar barato al país.

La mejor manera de recorrer la isla es alquilar un todoterreno, sobre todo si te apasionan la naturaleza y el senderismo. Así es posible descubrir cataratas perdidas, atravesar ríos, llegar a senderos poco transitados o circular por caminos volcánicos como el que lleva al volcán Askja. Un utilitario solo permite transitar por la N1, la carretera que circunvala la isla, y las excursiones son bastante caras. El clima es imprevisible, en un momento hace sol y al siguiente llueve o graniza. Hay que llevar ropa de abrigo incluso en verano. Esta época es el gran momento de visitar Islandia, cuando la mayoría de las carreteras están abiertas y muchos senderos se pueden recorrer a pie.

La N1 es la “autopista” que circunvala la isla, pero tiene solo un carril para cada lado y en muchos puentes se queda reducida a uno solo. Además es usual que crucen sin previo aviso alguna de las más de 600.000 ovejas que hay en el país, casi el doble que habitantes (330.000). El islandés es lo más parecido al noruego antiguo, la lengua que hablaban los vikingos. Por eso entienden las sagas escritas en los siglos XII y XIII. Borges lo llamaba “el latín escandinavo”.

Si te quedas con gana de más, aquí va el diario de bitácora que hice a vuelapluma durante la ruta de dos semanas por la isla, con todos los lugares que recomiendo.

rutaCatarata Glymur – La caminata que lleva a la catarata más alta de Islandia es un paseo entre flores moradas y arbustos por un camino de piedras y mesetas escarpadas. Se encuentra cerca de Reikiavik. El camino de tierra pasa varias veces por un riachuelo. El ruido del agua rompe el silencio del paisaje, a lo lejos se escucha el gorjeo de un pájaro. Es la naturaleza absoluta, es la inmensidad, parajes que parecen esculpidos para Juego de Tronos o para una saga épica como las que inauguraron e inspiraron la literatura islandesa en los siglos XII y XIII. Luego, una escarpada escalinata baja hacia una gruta, y el sendero continúa pegado al río. el tramo final es duro, escarpado. El premio es una magnífica cascada que cae sobre un cañón natural. El sonido del agua rebota en la roca y se amplifica.

Reikiavik – Es una ciudad efervescente, que en verano bulle de actividad. Los islandeses toman las calles y parques y disfrutan de esta urbe joven que mira al mar, con el puerto predominante, se tiran en el parque frente al magnífico Harpa (arquitecto). Aquí se celebran distintos festivales de cine. En verano es una delicia salir de marcha.

Círculo de Oro Pingvellir / catarata Oxarafoss / Géiser Strokkur / Catarata Gulfoss
Está cerca de Reikiavik, es gratuito y se puede ver con una excursión de un día completo desde allí.

Arranca en Pingvellir, donde puede verse la gigantesca falla formada por la separación de las placas tectónicas de Europa y América. Es el lugar donde se rompe el mundo. El camino que baja entre la falla es sorprendente, se vislumbra la fuerta de la tierra. El sendero de piedras negras arranca con un mirada sobre el paisaje, que domina un lago. Luego continúa a la vera de la falla, marrón grisácea. Muchos islandeses comparte el camino en esta joya natural. A la izquierda, un mirador ofrece una gran vista de las montañas cercanas. Al lado, una pequeña y recoleta iglesia de madera. Pingvellir (campos del parlamento) es un lugar que rezuma historia, pues en esta zona se reunía desde el año 930 uno de los primeros parlamentos del mundo.
Siguiendo el sendero se llega a la cascada de Oxarafoss, oculta tras la falla. Es un lugar escondido, que rezuma paz.

La ruta entre Pinvellir y Geysir se hace por paisajes de un verde inmenso, algo desolados. Al fondo, siempre montañas.

Geysir -Geysir es el géiser que da nombre a todos los géiseres del mundo. Hoy es difícil verlo expulsar agua. Por suerte, a su lado está el géiser Strokkur, un fenómeno sorprendente: el surgimiento de agua hirviendo desde el fondo de la tierra. Al llegar muchos turistas se congregan alrededor de la zona acordonada. En el centro, un gran agujero lleno de agua humeante. De pronto, en el agujero se forma una burbuja gigante y ¡fush! un chorro de agua sube 20 metros con una potencia increíble. ¡Oh! El grito de los visitantes es unánime. El viento desplaza el agua, que cae a gotas sobre la gente. Tras la primera sorpresa, casi todos aguantan, cámara en mano, para captar en una foto o vídeo el siguiente instante en el que el géiser muestre su fuerza. Lo imposible ocurre más o menos cada 6 minutos.

Catarata Gulfoss – La belleza de la catarata Gulfoss desborda las expectativas. Es una cascada inmensa, que se desparrama en varios niveles. El estruendo del agua no se acerca a la impresión que causa en el viajero este río de agua que se expande, se mueve y cae en una cascada que son muchas a la vez. La visión se vuelve verdaderamente única cuando, tras uno de esos típicos chaparrones (incluso en verano), sale el sol y dibuja un arcoíris perfecto sobre ella. Una visión sublime.

Catarata Haifoss – Una joya escondida. Alejada de los circuitos turísticos, para llegar a ella hace falta recorrer en 4×4 un tortuoso camino de grava negra. El premio es un salto de agua increíble, alto, sobrio, que cae hacia el abismo. Su nobleza se realza por la soledad del paraje, poco transitado a diferencia de Gulfoss.

Landmanalaugar – Islandia es un paraíso senderista. Una de las rutas más populares es la de Landmannalaugar a Porsmork. Para llegar al inicio hace falta un 4×4. La ruta completa dura cinco días, aunque solo con el primero ya se puede ver un camino de piedras volcánicas y rodeado de montañas de colores imposibles . Los glaciares comparten espacio con montañas humeantes por la actividad geotérmica. La montaña por la que se asciende cambia varias veces de color (marrón, amarillo, verde, gris, negro). Es un efecto curioso. Los campos de lava, los agujeros que rugen desde la tierra y las montañas coloreadas dan una sensación de estar en un lugar original y único.

Cerca de Landmannalaugar se encuentra Ljotipollur, que pese a lo que significa su nombre (el charco feo) bien merece un paseo: se trata de una laguna volcánica en la que los tonos rojos y ocres del cráter contrastan con el azul intenso del agua.

Hekla –  es un volcán activo que erupciona cada diez años. La cumbre está siempre cubierta de nubes, de donde proviene su nombre, “el encapuchado”. El paisaje alrededor mezcla cumbres nevadas con el suelo negro volcánico.

Catarata Sljalandfoss – Se trata de una catarata menos espectacular que otras, pero con dos características curiosas: una es que se ve desde muy lejos, pues da a una llanura inmensa. A un kilómetro ya se vislumbra su perfil, cayendo a una meseta verde. Al acercarse, se descubre otra idea: bajo su fuerza imponente hay un camino que permite recorrerla por dentro, viendo una parte poco usual de un salto de agua.

Catarata Skogafoss –Es una de las más famosas, se encuentra en el desvío de la N1. Es un salto de agua bastante alto y espectacular. el agua baja con tanta fuerza que no se ve la pared de roca tras ella. Cuenta la leyenda que un jefe vikingo escondió dentro un tesoro, y nadie ha sido capaz de entrar a buscarlo. Lo que sí puede hacer el visitante es subir hasta su tope por una escalera de 400 peldaños. Desde arriba, se contempla una vista escarpada del conjunto, que arranca en el río, plácido, y desemboca en la cascada. Numerosos turistas la fotografían.

El camino que lleva a Skaftafell se hace entre paisajes en los que las piedras están cubiertas de una especie de musgo eterno, de color verde grisáceo. Aquí lo raro es la norma. La isla de hielo, que eso significa Islandia, es también de fuego, por sus numerosos volcanes y zonas geotérmicas que desprenden humo y calor.

Skaftafell (ruta 17 kilómetros) – En el camping de Skaftafell arranca otra ruta senderista imprescindible que desemboca en el impresionante glaciar Vatnajökull que conforma el Parque Nacional más grande de Europa. El sendero pasa primero por la catarata Svartifoss, que cae entre paredes de basalto de un negro intenso, como un anfiteatro ennegrecido e hirviente, sigue luego hacia un mirador. Arriba del todo aguardan montañas perfectas, como sacadas de una postal. La bajada pasa por una lengua glaciar de enormes dimensiones. Es un blanco absoluto, inmenso, como si a un gigante de hielo se le hubiera derramado el salero. La lengua desemboca en una laguna glaciar en la que flotan los icebergs, como barquitos blancos. Son 17 kilómetros, entre 5 y 6 horas de caminata. Se recomienda subir por el lado de la cascada, el otro tiene una difícil subida de pedruscos.

laguna

El lago glaciar Jokulsarlon.

Laguna Jokursarlon –A 40 kilómetros en coche por la N1 se encuentra Jokursarlon, una laguna glaciar que merece una parada. (Alda) Los icebergs desprendidos del glaciar flotan en el agua mientras el majestuoso glaciar los contempla. Se puede dar una vuelta en el barco turístico o simplemente recorrer su orilla y sentir la tranquildad que transmite. Ha sido escenario de cine: aquí rodaron ‘Tomb raider’, con Angelina Jolie, y ‘Muere otro día’ de James Bond.
Se pueden ver focas. Y fuera hay orcas.

Eskifjodur, pueblo con un puerto con grandes barcos y pequeñas casitas de colores. Tiene una pequeña cascada muy pintoresca-
Mjoifjordur: aldea a la que se llega por un escarpado camino de tierra plagado de pequeñas cascadas. Abajo esperan un barco oxidado y varias casas que miran al fiordo.

Catarata Hengifoss – Una enorme cascada (120 metros) que cae sobre un empinado salto negro y rojo. el ruido es ensordecedor. Líneas rojas marcan el negro de las paredes. Es un escenario apocalítico, volcánico, con enorme fuerza. Una caldera del infierno. Antes de llegar, el sendero para por Litlanesfoss, una cascada parecida pero más pequeña. Cuando el coche avanza por la N1 hacia el noroeste, el paisaje vuelve a cambiar y parece un desierto, siempre jalonado de montañas y nubes. La tierra pasa a ser árida.

Namafjall Hverir, campo geológico al lado del lago Myvatn – Uno de los lugares más sorprendentes del país, una clase avanzada de geología en pocos metros.  Si es que el mitológico Hades existe, podría parecerse a este sitio: agua hivierndo borboteando en el suelo, densas nubes de humo con fuerte olor a sulfuro surgiendo inexplicablemente de la tierra y todo en medio de un paraje inhóspito y desértico, sin un solo árbol. Las aguas son grises, un color absurdo, y parecen sacadas de un campo lunar. La cercana montaña también humea. La tierra arde. Las caras de sorpresa de los turistas son impagables. Nada te prepara para ver gemir así a la tierra. En otro punto, una gran columna de humo a presión sale de un montón de piedras. Es una fumarola.

Husavik, museo de las ballenas y avistamiento de ballenas – Capital del avistamiento de ballenas. Museo de las Ballenas: tiene un espectacular esqueleto de ballena azul de 24 metros, así como de cachalote, orca y narval. Y mucha información (en inglés). Los amantes de estos cetáceos pueden hacer una excursión en un barco para verlas en la bahía. Es muy sencillo verlas. Husavik es una localidad costera bonita, con un puerto centrado en las ballenas, y justo al lado el museo de la ballena. Hay una iglesia de madera curiosa y casitas bajas.

Jokulsargljufur, ruta entre Asbyrgi y Dettifos (el gran cañón) – Los amantes del senderismo tienen otro pequeño tesoro en la ruta entre Asbyrgi y Dettifos. Es un camino de dos días entre acantilados y bosques de abedules. Los más perezosos pueden ir de un sitio a otro en coche. Según la mitología nórdica, una pisada del caballo de Odín creó el cañón de Asbyrgi, que tiene forma de herradura. Es una formación rocosa enorme, cortada de forma muy vertical. En su lateral, un precioso estanque lleno de aves. Un camino suave, que sale del centro de visitantes, permite subir al cañón y verlo desde arriba.

Dettifoss – Es un auténtico torrente de agua que cae con fuerza y desborda el paisaje. Considerada la catarata más caudalosa de europa, la columna de vapor que hace el agua al golpear con el suelo se divisa desde un kilómetro. La cortina de agua se hace una nube al acercarte a su caída. Es única. Una caminata desde ahí lleva a Selfoss, compuesta por varias cascadas que se desparraman durante muchos metros, como una cortina inmensa.

Baños naturales de Myvatn – Los baños naturales de Myvatn son una experiencia relajante, y una alternativa más económica a la muy conocida Laguna Azul, cercana a Reikavik. El clima frío y nublado exterior contrasta con el bienestar que se siente dentro. Es posible beber cerveza dentro. Se trata de dos enormes lagunas, una de agua más caliente y otra templada, que se encuentran al aire libre. Es una experiencia relajante.

El impresionante volcán Askja y su lago dentro del cráter – El acceso solo se hace en 4×4, ya que es un camino pedregoso y que atraviesa dos caudalosos ríos. El camino desde Myvant son más de cuatro horas. Por el camino, se tiene una vista de Herdubreid, la montaña más característica del país: parece un pastel de chocolate con nata por encima, ya que la nieve cubre su cumbre plana. El cráter del volcán es inmenso, lo que da idea de cómo debió ser la erupción. En su interior hay un precioso lago helado con playas de hielo que refleja de forma fascinante las montañas que forman el cráter. Pero aun hay más. Junto a ese lago hay otro más pequeño con agua templada por la energía geotérmica y con el agua de color turquesa. Es un paisaje imponente. El agua del lago grande refleja el paisaje como un espejo, el pequeño tiene agua turquesa con olor a azufre. Es espectáculo de las nubes reflejándose en el lago es sublime. Para llegar, hay que atravesar un espectacular campo de lava petrificado, viva imagen de la desolación. Aquí se entrenaron los astronautas del Apollo, por ser un paisaje lunar.

Cascada Godafoss – Se ve desde la N1, está a un minuto. Es una cascada no muy alta pero doble, muy caudalosa, con agua de un azul intenso. En los días soleados puede verse el arcoíris. El agua pasa por un campo de lava. Según el mito, aquí arrojaron los ídolos antiguos cuando el país se convirtió al cristianismo, de ahí su nombre (cascada de los dioses). Al lado hay un pequeño pueblo donde se puede pernoctar.

Akureyri, marcha nocturna y más ballenas – Es una ciudad pequeña pero muy activa, en invierno con deportes de frío, en verano con bares, senderismo y avistamiento de ballenas. En el resguardado fiordo de la ciudad hay varias ballenas jorobadas de mayo a septiembre, y en raras ocasiones alguna ballena azul. Se sale en un barco que hace una ruta de tres horas. La experiencia de ver a estos gigantescos cetáceos es difícil de explicar. Es un animal esbelto, majestuoso. El chorro de agua que suelta sube dos metros, y luego sale u espalda y acaba con un golpe de cola. El primer avistamiento es un acontecimiento. ¡Oh! Saltan los flashes. Los turistas contienen la respiración. ¡Otra ballena! Es difícil transmitir la emoción profunda de estar al lado de estos animales.

Laufás, pueblecito al lado de Akureyri – Pueblecito a 18 kilómetros de Akureyri casi tan pequeño como su cementerio. Tiene tejados de césped y es una buena manera de comprobar cómo era el estilo de vida tradicional islandés. Sus cinco casas fueron abandonadas y ahora están restauradas y sirven como museo. Al lado, una pequeña iglesia de madera. De fondo, las montañas del fiordo, donde esperan las ballenas. Hay un museo que muestra cómo era la vida aquí (1.200 coronas).

 La F35 es una de las rutas que acortan por el centro de islandia, y solo abre los meses de verano. Es la única de estas rutas que puede atraversarse en un coche normal. La hacen también autobuses. Va de Akureyri a Gulfoss. Empezando por arriba, el paisaje se va volviendo más seco, y luego pasa entre dos glaciares. Es un carril de grava en buen estado.

Hvelavellir, campo de actividad geológica – A medio camino por la F35 está Hvelavellir, un campo de actividad geológica sorprendente, con fumarolas, agua hirviendo y una pequeña piscina con agua caliente de forma natural donde es posible bañarse. También hay un camping (1.800 coronas). El contraste entre el blanco del glaciar y la tierra marrón es curioso.

Si se os ocurre algún consejo más, podéis dejarlo en los comentarios.

Anuncio publicitario

2 comentarios

Archivado bajo Viajes

2 Respuestas a “Consejos para viajar a Islandia

  1. Macu Gavilán

    ¡Gracias por los buenos consejos! 🙂

  2. Ana Vera

    Muy bien documentado

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s